viernes, 20 de diciembre de 2013

Capitulo 50

Envolviendo mis brazos alrededor de él, le digo—: Gracias Nico.
 
—Ahora —dice, moviendo sus caderas de lado a lado—. Tú y yo vamos a la pista de baile. Vamos. —Agarra mi mano y me lleva de vuelta al club.

Capitulo 50

Estoy sonriendo porque Nico me hizo sentir mucho mejor acerca de mí misma. Estamos pasando por delante de las mesas, cuando escucho de nuevo—: Mariana —Me quejo y doy la vuelta. Entonces sonrío rápidamente. 
 
—¡Hola!
 
Euge me sonríe. —No sabíamos que estarías aquí.

—Estoy aquí con Nico —contesto, señalando hacia él—. Nico estos son mis amigos Euge, Rose, Matt y, por supuesto, Agus.
 
—¿Se están divirtiendo? —pregunta Nico.
 
—Sí —responde Rose—. ¿Dónde está Peter?
 
Indicando, digo—: Arriba.
 
—Justo allí, en realidad —replica Nico.
 
Todos miramos y vemos a Peter en la pista de baile con la rubia. Bueno, voy a vomitar en frente de mis nuevos amigos.
 
Hay un momento de silencio y luego Rose explica—: Pensé que él y tu estaban juntos.
 
—¿Qué? —Nico dice, luciendo bastante confuso.
 
—¿No es tu novio? —Rose pregunta.
 
Estirando mi mano detrás de Nico, lo pellizco realmente duro. —Yo en realidad nunca dije eso. Nosotros no somos exclusivos. Puede bailar con quien quiera.
 
Nico lo capta. —Sí, se está preocupando porque me escabullí con Mariana. ¿Cierto, nena?
 
—Sí —me río, sintiéndome un poco aliviada.
 
—Wow, puedes besar a Peter y salir con otro chico lindo, ahora eres mi ídolo. —Rose suspira.
 
De repente, Nico tira de mí contra él. —En realidad, ya que Peter está absorto, voy a mantenernos ocupados.
 
—¿Eh? —respondo confundida, volviéndome hacia él. De pronto, sus labios están en los míos. Me coge tan por sorpresa, que me congelo, pero ¿sabes qué? Se siente bien, y Peter obviamente está teniendo su propia diversión. Nos besamos durante un minuto y luego se aparta.
 
—Wow, Mariana —balbucea Nico—. Eres fenomenal besando.
 
Ruborizándome, digo—: Gracias.
 
Con una sonrisa, Nico mira a mis amigos. —Muy bien, eso fue divertido.
 
—¿No se enojara Peter? —Agus dice lentamente—. ¿Todos se besan entre sí?
 
—Dios, no, ¡yo no beso a Peter! —exclama Nico, y luego se ríe—. Este fue nuestro primer beso. Ella es muy tímida en realidad, y Peter probablemente me va a cortar mi hombría.
 
Niego con la cabeza. —Eres ridículo. —Nico simplemente me sonríe.
 
La canción cambia y Rose grita—: ¡Me encanta esta canción! Vamos a bailar.

—Definitivamente, vamos —responde Nico. Agarra mi mano y tira de mí hacia la pista de baile. El ritmo es rápido y muy divertido. Nico me sostiene y me hace reír incontrolablemente.
 
Candela y Vico están de repente junto a nosotros. —¿Qué están haciendo aquí? —grito.
 
—Queríamos saber dónde estaban —responde ella—. En realidad, saque a Vico a la pista de baile. —Sonrío y lo saludo.
 
Por toda una canción, me olvido de Peter. A quién le importa ¿cierto? En un momento, Nico y Vico me tienen entre ellos bailando. Empujo a uno con las manos y al otro con la espalda tratando de separarlos, pero fallo. Así que, me rindo y río. Candela finalmente me saca y bailamos juntas. Se siente increíble estar con tanta gente que realmente puedo llamar mis amigos.
 
Cuando la siguiente canción llega, siento unas manos que se envuelven a mí alrededor. Me doy la vuelta para encontrar a Peter. Un poco perturbada, lo miro. —¿Qué? Ya no estás entretenido por la rubia.
 
—No quería hacer eso —responde Peter.
 
—Tonterías —chasqueo, probablemente con demasiada dureza—. Pero está bien, yo tenía mi propia diversión. Nico es muy entretenido.
 
Una mirada de enojo pasa sobre el rostro de Peter. —Sí, lo vi. —Él me mira por un segundo y luego dice—: Lo siento.
 
Eso me toma un poco desprevenida. —¿Por qué? —pregunto, un poco nerviosa.
 
Abre la boca y luego la cierra. —Sólo quería bailar contigo esta noche, y dejar eso pasar, fue estúpido de mi parte. Lo siento. No significo nada.
 
—Así como lo fue besar a Nico —afirmo, mirándolo a los ojos.
 
Peter se inclina y susurra en mi oído. —Baila conmigo —Su aliento caliente envía escalofríos por mi columna vertebral. Envuelvo mis brazos alrededor de su cuello y me presiona contra él, poniendo las piernas entre las del otro. En ese momento, como que me olvido del resto del mundo.
 
Bailamos por un rato. Tiene una sensación diferente esta vez. Un poco más tarde, una canción muy caliente suena. Quiero decir, realmente caliente. Doy un paso atrás alejándome de Peter, y estoy a punto de caminar hacia la mesa, porque... sí... pero no llego a ninguna parte. Peter me agarra de la cintura y tira de mí contra él. Con mi espalda está hacia él, y desliza sus manos a mí alrededor. Mientras bailamos, me acerca más. Eso me quita el aliento. No sabía que bailar se podía sentir de esta manera. En algún punto, toma mis brazos y los lleva alrededor de su cuello. Peter desliza suavemente sus manos hacia abajo por ellos y por mis costados. Mi aliento realmente queda atrapado en mi garganta.
 
Lleva sus labios a mi oído y susurra—: Mariana... —Es entonces cuando todo vuelve hacia atrás, a la noche que pasamos en los brazos del otro. Es como un puñetazo en el estómago. No puedo, no puedo hacer esto otra vez. Me alejo y empiezo a empujar a abrirme paso a través de la multitud. Oigo a Peter gritar—: ¡Mariana!
 
Solo sigo alejándome, de repente golpeo a alguien. —Lo siento — chasqueo.
 
Se da la vuelta y siento como si mi mundo se detuviera. Howard me sonríe. —Por qué si no eres tú, veo que te disfrazaste esta noche.
 
De repente, no puedo respirar y mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas. Instintivamente me agarro la garganta. —No, no, no, no —Es todo lo que sale. Me doy la vuelta para correr y volar a los brazos de Peter.
 
Él me ve. —Mariana, ¿por qué huyes? —Peter se detiene y me mira— . Mariana, ¿qué está mal?
 
—No, no, no, me tengo que ir, tenemos que irnos —chillo.
 
—Mariana, ¿qué está mal? —grita Peter.
 
Todo lo que puedo decir es—: Howard, no puedo, no puedo verlo. ¡Por favor!
 
Una mirada de furia pasa por su rostro. —¿Dónde? —Girándome, señalo directamente hacia él. Peter me empuja hacia un lado y en un instante tiene a Howard por la camiseta—. Pedazo de basura, piensas que está bien agredir a las chicas, ¿por qué no te metes con alguien de tu tamaño?
 
Howard se burla de él. —Lo que sea que dijo la pequeña bruja es mentira. Ella se lanzó hacia mí.
 
—Eres mío —gruñe Peter. Empuja de repente a Howard hacia atrás. Hay una pared allí. Impacta en ella con toda su fuerza. Peter lo agarra por el cuello y lo levanta del suelo—. ¿Cómo se siente no tener ningún control, teniendo unas manos que te asfixian? ¿Se siente bien? Te reto, dame un golpe. Quiero que lo hagas. Golpéame, un golpe. Te doy eso. Después de eso eres mío.
 
—¡Peter! —le grito—. ¡Detente!
 
Me ignora. Peter prácticamente grita—: ¡Vamos vándalo, golpéame! ¡Te reto!
 
Vuelvo a retroceder hacia la multitud donde está Vico. Me encuentra a mitad de camino con Nico. —¿Qué diablos está pasando? —grita Vico.
 
—¡Es Howard! —grito—. ¡Agarren a Peter antes de que lo mate!

—¿Quién? —Nico pregunta.
 
—El tipo que me atacó —chillo.
 
Nico dice—: ¡Oh, no, vamos Vico!
 
Volvemos corriendo a donde Peter. Todos en el club se han detenido y están mirándonos. Cuando volvemos a la pared, Peter sigue gritando—: ¡Vamos, golpéame, vamos! ¿Crees que puedes agredir a las mujeres? ¡Trata de elegir a alguien que pueda defenderse! ¡Vamos, TE RETO!
 
Rápidamente, Nico agarra a Peter y tira de él hacia atrás, y Vico se acerca a Howard. Peter sólo grita y lucha contra el agarre de Nico. En un segundo, Howard da un paso adelante para golpear a Peter, pero Vico es demasiado rápido. Agarra a Howard de su brazo, y lo voltea completamente de cabeza, impactándolo contra el suelo. Seguridad viene detrás de nosotros. Nico mira y gruñe—: ¡Llamen a la policía!
 
El portero saca un radio. Empieza a hablar en través de él. Peter sigue luchando contra Nico, pero Nico tiene un férreo control sobre él. Empujo y doy un paso hacia él. —Peter, Peter, cálmate —susurro. Poniéndole las manos en la cara, digo—: Peter, mírame. Vamos, mírame. —Finalmente lo hace—. Nene, déjalo estar. La policía está en camino. Te necesito, te necesito conmigo. Si le haces daño, te detendrán, y te necesito. Quédate conmigo.
 
Peter deja de luchar y me mira. —Quiero matarlo —afirma con dureza.
 
—Lo sé, por favor, te necesito conmigo, ¿de acuerdo?
 
Él asiente con la cabeza y deja de luchar. Nico lo deja ir. Peter se acerca y envuelve sus brazos alrededor de mí. Lo dejo, porque las lágrimas están a punto de llegar.
 
Vico recoge a Howard del piso, con su brazo atrapado detrás de él.
 
—Deberíamos llevarlo a la parte de atrás. Este es un espectáculo lo suficientemente grande.
 
Nico sacude la cabeza. —Lo llevaremos a la oficina de mi hermano.
 
Nos abrimos paso entre la multitud. Es como la separación del mar rojo. Peter no me suelta en todo el tiempo, por lo que estoy muy agradecida. Cuando llegamos a la oficina, Nico abre uno de los cajones de su hermano. No estoy segura lo que saca de él, pero Vico gira a Howard. Nico envuelve algo alrededor de sus muñecas y tira con fuerza.
 
—¿Qué son? —le pregunto.
 
—Esposas de cuerda con cierre —Nico responde—, las utilizamos para someter a las personas. —Asiento con la cabeza en comprensión.

Observo mientras Vico empuja a Howard al suelo. —Siéntate pedazo de...
 
—Vico —chasquea Candela—, ¡No!
 
Repentinamente siento frio y me froto los brazos. Peter me mira. — ¿Tienes frío?
 
—Sí, está bien —le susurro. Peter se desabrocha la camisa y se la quita. Con cuidado, la desliza sobre mí. Paso los brazos a través de ella y la aprieto fuerte contra mí—. Gracias. —Él simplemente envuelve sus brazos alrededor de mí, abrazándome suavemente.
 
—¡Esto es ridículo, no puedes hacer esto! ¡Te demandaré! ¡Déjame ir! ¡Ella es una perra mentirosa! —grita Howard—. ¡No hice nada!
 
—¡Tenía moretones idiota! —grito—. La policía lo sabe. ¡Tomaron fotos!
 
Vico da unos pasos hacia Howard. —Yo que tu aprendería a callarme bastante rápido, o sacaré a todo el mundo de la habitación, y tú y yo vamos a pasar algún tiempo a solas.
 
—No puedes tocarme —gruñe Howard.
 
—Hasta donde cualquiera sabe te caíste y te golpeaste la cara contra suelo de camino aquí —gruñe Vico.
 
Howard se calla rápidamente. Todos nos quedamos ahí por un tiempo, sólo en silencio. De repente, hay una conmoción detrás de nosotros. Nos volvemos para ver a los policías que vienen hacia nosotros. — Aquí vamos —Peter susurra.
 
Inmediatamente hacen un millón de preguntas. Peter explica quién es Howard y lo que estaba pasando. Una mujer policía me retira a un lado y me pregunta. Tengo que decirles como sé que es él, que estoy segura. Ellos hablan por la radio y obtienen la información que necesitan de la estación. Es un montón de ruido y empiezo a sintonizar todo. Howard grita que estoy mintiendo. Por último, un oficial de policía le quita la cuerda y le pone las esposas reales. Cuando Howard camina junto a mí, lo miro. Escupe hacia mí, pero por suerte no me alcanza.
 
Peter salta hacia él, pero Vico lo agarra.
 
Después de un rato un oficial dice—: Muy bien, estaremos en contacto con la señorita Esposito. Traten de tener una buena noche.
 
—Sí —murmuro. Observamos al oficial irse.
 
Mirando hacia mí, Peter dice—: Vamos a llevarte a casa.
 
—Aquí —le digo, quitándome la camisa—. Debes ponerte esto de nuevo.

—No, quédatela, estoy bien —responde. Yo asiento con la cabeza. Peter mira a todos los demás—. Vamos a salir.
 
Nico va hacia la esquina. —Puedes usar la salida trasera. Está en dirección a tu auto.
 
—Gracias —suspira Peter—. ¿Lista, Mariana?
 
—Sí, adiós muchachos. —Todos se despiden con la mano.
 
Peter me toma de la mano y salimos. El viaje a casa es tranquilo. Él sostiene mi mano cada vez que puede, que no es mucho cuando conduces con cambios manuales. Sostengo su camisa a mí alrededor, porque es reconfortante. Huele a él, y eso me tranquiliza.
 
Cuando entramos en el apartamento, Peter sólo enciende una luz. Voy directamente a mi habitación y cierro la puerta. Deslizándome fuera de la camisa de Peter, la pongo en mi cama. Entonces me quito todo lo demás, y me pongo el pijama. Ahora me siento mejor. Cuando abro la puerta, Peter está de pie allí. —Quería asegurarme de que estabas bien.
 
Asiento con la cabeza. —Sí, la verdad es que estoy bien, casi aliviada. Lo atrapamos, ellos lo tienen, y si todo va bien, no va a hacerlo de nuevo. Eso me hace feliz.
 
Apoyado contra la pared, Peter suspira. —Siento que esta noche fue un horrible desastre. Soy culpable de muchas cosas.
 
—¿Por qué fue un desastre, debido a Howard? Es una buena cosa que lo atraparan. Aparte de eso, me divertí.
 
Sus ojos miran hacia mí. —Sí, pero te he hecho daño.
 
Ahora, aparto la mirada rápidamente. —No sé lo que quieres decir. Estaba bien.
 
—Mariana, nunca debí haber ido y besado a esa chica o bailar con ella. Solo que... cuando me dijiste que lo hiciera, estabas tan seria. Se sintió como… que no te importaba. Lamento haberte abandonado así.
 
—Está bien Peter —susurro, mirando al suelo.
 
—¿Puedes prometerme algo? —pregunta.
 
Mirando hacia él, le pregunto—: ¿Qué?
 
—No vuelvas a besar a Nico de nuevo. Quiero decir, puede que en realidad tenga que hacerle daño la próxima vez.
 
Eso me hace reír. —Todo fue por diversión. De todas formas, él me confirmó que era muy buena besando. Así que, me siento orgullosa de mí misma.
 
—Eres muy buena besando —Peter responde—. Ya te lo dije.

—Lo sé —gruño—. Pero eres tú. Es probable que no me lo dijeras aunque fuera horrible.
 
—Me encanta besarte —afirma, y tan pronto como esas palabras salen, se congela. Ni siquiera sé qué decir. Es como si mi lengua estuviera pegada a mi paladar. Nos quedamos ahí un rato, mirándonos fijamente el uno al otro, cuando Peter finalmente dice—: Tenemos que ir a la cama.
 
—Juntos —le susurro.
 
No aparta su mirada de mí. —Eso depende de ti. —Hago una pausa y no digo nada. Peter mira hacia otro lado y dice—: Probablemente no deberías, en caso de que un chico te invite a salir.
 
—Pero nadie lo ha hecho —le respondo—. Así que… ¿qué más da?
 
—Mariana —dice—. Tú eres la que tiene que responder a eso. Me voy a meter en mi cama. Si te unes a mí, eso es genial. Si no, te veré en la mañana. —Se pone de pie y camina hacia mí. Suavemente me besa en la frente, pero permanece ahí durante un minuto. Cuando se aleja, es como si algo de repente faltara. Lo veo caminar a su habitación.
 
Me quedo ahí por un tiempo, mirando fijamente a su puerta. No tengo ni idea de qué hacer. Poco a poco, me doy la vuelta y entro en mi habitación. No me meto en la cama, solo me siento en ella. La camisa de Peter está en el extremo. Me inclino a recogerla. La llevo a mi cara, y la huelo, huele tan bien.
 
—¿En serio estas sentada allí, oliendo mi camisa? —Oigo que dicen desde mi puerta.
 
Tirándola, grito—: ¡No! ¿Qué demonios estás haciendo aquí? Pensé que ibas a la cama.
 
—Decidí que no quería dormir solo, y ya que te metes en mi cama todo el tiempo. Vengo a la tuya esta noche.
 
—Umm —digo, mientras camina dentro de mi habitación—. ¿Crees que es una buena idea?
 
Peter salta al otro lado de la cama y me mira. —¿Por qué sería una mala?
 
—No lo sé —le susurro. Acaricia la cama junto a él. Contra todo mi mejor juicio, me acuesto. Tiramos de las colchas sobre nosotros, pero no ruedo hacia él.
 
—¿Te repelo de repente? —pregunta.
 
Dando la vuelta hacia él, le digo—: No, ¿por qué?
 
—Por lo general, te abrazas a mí, pero esta noche estas como a un metro de distancia.

—Lo siento —le respondo—. Yo sólo...
 
Peter suspira. —Realmente te hice daño esta noche, ¿no? —No digo nada, pero aparto la mirada—. Mariana, me siento horrible.
 
—¿Te gustó? —pregunto en voz baja.
 
—¿Besarla a ella? —pregunta. Asiento con la cabeza. Tomando una respiración profunda, Peter responde—: En realidad no. Es muy hueco cuando besas a una extraña. Mi lado masculino estaba emocionado, pero mi parte emocional no estaba muy feliz.
 
Vuelvo a mirarlo. —Eso suena realmente estúpido.
 
—Sólo confía en mí Mariana, no significo nada. Al menos cuando te beso significa algo. Debí haberme quedado contigo esta noche, y aprendí mi lección. Besaste a otro chico.
 
—Sin embargo, voy a besar a otros chicos y tú besaras a otras chicas. ¿No deberíamos estar de acuerdo con eso? —pregunto.
 
Mirando al techo, Peter dice—: Supongo que tienes razón. No creo que esté de acuerdo alguna vez contigo besando chicos, pero creo que es mi parte territorial y protectora.
 
—Ah. —Es la única respuesta que doy. Con eso me giro y pongo mi cabeza en su pecho—. No quiero verte besar a las chicas. Me hace sentir rara.
 
—Tu lado protector y territorial, ¿eh?
 
—Supongo —murmuro—. Vamos a dormir, y hacer frente a todo esto más tarde. Estoy cansada.
 
Peter besa la parte superior de mi cabeza. —Está bien.
 
—Quiero volver a salir —Suspiro—. Sólo que la próxima vez, vamos a estar pegados el uno al otro.
 
Peter ríe suavemente —Creo que es una buena idea. Buenas noches Mariana.
 
—Buenas noches, Peter —respondo, acurrucándome contra él.

28 comentarios :

  1. jajajaj estaban re enamorados y lo negaban

    ResponderEliminar
  2. ssssssssssssssssssssssssssss

    ResponderEliminar
  3. na más más por fa regalo de navidad

    ResponderEliminar
  4. masssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
    por favorrrrrrrrrrr

    ResponderEliminar
  5. ´++++++++++++++++++++++++++++++++++
    ++++++++++++++++++++++++++++++
    ++++++++++++++++++++++++++++++++
    +++++++++++++++++++++++++++++++
    +++++

    ResponderEliminar
  6. OWWWWWWWWWWWWWWWWWWWWWWWN' SE AMAANNN Y NO ANIMANNNNN!!! Son re bipolares estos dos, me encantaron los 3 ultios capitulos, Comento por los tres ya que no comente los demas jajajajja estaba ocupadita. :D

    Espero mas!!
    Att: andrea antequera
    Sube mas

    ResponderEliminar
  7. Que admitan de una vez lo qe les pasa!

    Arii

    ResponderEliminar
  8. mmmmmmmmmmmm...esta salida va a traer consigo grandes cosas
    los sentimientos estan de a poco saliendo a la luz
    quiero masssss
    besos

    ResponderEliminar
  9. awww...!! que le diga de un solo lo que paso juro que el se acuerda.... medio como que tiro algo ahi..!

    ResponderEliminar
  10. Me encanta subí más novee porfíss

    ATTE: Valeria : )

    ResponderEliminar
  11. Van a parecer lapas .No se dicen nada ,y a la vez se dicen todo .Espero k lo asuman pronto!!!!!.

    ResponderEliminar
  12. porfas maraton!!! :'(
    jajaj lo d la camisa me morii
    maaass

    ResponderEliminar
  13. síiiiii por fa maratón!!!!! Besos Naara

    ResponderEliminar