sábado, 16 de noviembre de 2013

Capitulo 35

8 horas desde que presioné el botón de auto-
destrucción

7 semanas para el cumpleaños de Lali

Aparentemente, Mariana apareció en mi casa esa noche, pidiendo hablar conmigo. Estaba en el desván viendo televisión y Euge fue a abrir la puerta. Tenía un rostro solemne cuando volvió a subir. Euge me dijo que le dijo a Lali que yo no estaba listo para hablar.

Me salté de nuevo la escuela al día siguiente. Mis notas estaban empezando a caer, pero no me importaba tanto como debería. Toda la esperanza y toda la positividad que parecía haber encontrado en los últimos meses estaban empezando a difuminarse. Estaba empezando a sentir lástima por mí mismo otra vez.
 
Una vez que empiezas a caer por la pendiente resbaladiza de la depresión, es difícil subirla.
 
Y a veces no quieres subirla.
 
Lo horrible de vivir en una isla pequeña, donde todos saben quién eres y dónde se supone que debes estar a ciertas horas del día, es que no hay muchos lugares para esconderse cuando estás faltando a la escuela. Así que, terminé en West Beach, estacionado en un lugar que daba al agua. En el lado sur estaba una tienda de cerámica, al norte un complejo. Ambos eran lugares turísticos, así que me sentía bastante seguro estando ahí. Nadie me reconocería.
 
Saqué mi diario y pasé mis dedos por la cubierta negra. No había escrito en él por un tiempo. En realidad, no había sentido la necesidad de hacerlo. Pero me sentía como si fuera a explotar si no sacaba algunas palabras de mi cabeza.

Odio a Mariana por lo que dijo. No pensaba que fuera posible.
 
¿Cómo pudo decir algo así? ¿Ella deseaba escucharme decir su nombre? ¿Por qué le dice eso a alguien como yo? ¿Podría haber dicho algo peor?
 
Primero me dice que no cree en el amor. En serio, ¿qué chica no cree en el amor? Luego, no me dejará decirlo, y básicamente dice que ella nunca me lo dirá. Y ahora esto.
 
Parte de mí piensa que estoy exagerando.
 
Pero a veces siento como si toda la mierda en el mundo está creciendo dentro de mí, como si todo lo malo me está llenando como un globo. Lo rechazo todo, vivo mi vida feliz.
 
Pero a veces ese globo explota y toda la mierda aterriza sobre todo a mí alrededor.
 
Odio esto.
 
Odio esto.
 
Odio esto.
 
Me odio.

1 hora hasta mi autodestrucción.
7 semanas para el cumpleaños de Lali.

—¿Estás seguro de esto? —preguntó Nico, colocando una mano en mi hombro—. Sabes cómo va a ser esta noche, ¿verdad?
 
—Paula tiene grandes planes para ti —dijo Gaston mientras observaba la larga fila de coches aparcados a lo largo de camino de entrada de Paula— Eso es sólo la forma en la que Paula es.
 
Mi mandíbula se apretó cuando aparcamos en un lugar de estacionamiento, que era un poco estrecho y en su calzada había miles de árboles. Saqué las llaves del encendido y las deslice en el bolsillo de mi chaqueta de cuero. Poco a poco asentí con la cabeza.
 
Paula, que conducía su propio BMW y vivía como una princesa en su castillo junto al mar.
 
Podía escuchar la música desde el auto. Las luces destellaban y palpitaban desde las ventanas y podía oír a la gente que reía y gritaba.
 
Ignoré lo que Paula había dicho, no había necesitado la invitación para entrar. Iba a la mitad esperado encontrar a un gorila que estuviera en la puerta principal, que habría sido el estilo de Paula, pero no había nada. El aire era grueso y bochornoso cuando caminamos a través de las puertas principales. La casa se lleno por aproximadamente cien personas. Cada uno llevaba una especie de sombrero brillante del partido o una máscara decorada con brillo y plumas. El lugar entero era negro y morado, y todo fue cubierto con brillo. No había ningún signo de los padres de Paula.
 
—¡Wow! —dijo Nico en voz alta mientras nos abrimos paso entre la multitud—. Esto es una locura, ¿cuánto crees que gastaron en esta fiesta?
 
Negué con la cabeza, mirando a mí alrededor. Había una muy brillante y cara bola de discoteca colgando del techo abovedado, candelabros negros con velas negras a juego por todas partes, alguna clase de cosas grandes y brillantes con joyas colgando de ellos. La fiesta había sido profesionalmente decorada.
 
—¡El Shaw está en la casa! —De repente una fuerte explosión resonó en la puerta principal.
 
Los tres nos volvimos para ver a Blake posando en la puerta, levantando las manos por encima de su cabeza como una especie de héroe de la lucha libre profesional. La gente de repente se congeló y luego los susurros comenzaron a estallar. Teniendo en cuenta que él y Paula recientemente habían roto, seguramente habría una abundancia de momentos torpes antes de que la noche terminara. Sin dejarse intimidar por ese hecho, Blake fue rodeado por las niñas de segundo año.
 
Gaston, Nico y yo negamos con la cabeza y seguimos caminando hacia la cocina.
 
No había uno sino tres cocineros trabajando en la cocina, arrastrando una interminable bandeja de alimentos en el bar. Todo, desde los camarones a algún tipo de quesos de lujo a los alimentos que ni siquiera conocía. Agarrando una placa de vidrio transparente de una pila, lo llené y me volví para ver la multitud con Nico y Gaston.
 
—No hay señales de Paula—dijo Nico mientras recorría la multitud. Yo sabía que él estaba buscando a Euge, que había quedado con unos amigos unos quince minutos antes que nosotros.
 
—Hombre, tengo un mal presentimiento—dijo Gaston. Vi sus ojos fijos en algunas personas con vasos de plástico rojos en sus manos.
 
Algo dentro de mí se congeló cuando vi esos vasos. Sinceramente, no esperaba que todos se aferren a sus promesas de todo el año, pero todavía se sentía como una bofetada en la cara verlos beber.
 
—Nada bueno —dijo Nico, sacudiendo la cabeza.
 
Ni que lo digas.
 
—Juan Pedro Lanzani —una sedosa voz dijo detrás de mí—. Me alegro de que hayas podido venir.
 
Pasé el resto de la comida en la boca de un trago doloroso. Me di la vuelta lentamente.

Paula estaba parada allí llevaba un vestido de seda púrpura, adornado con plumas negras en todos los lugares correctos. También llevaba una máscara color negro, su pelo recogido en la parte superior de su cabeza en un lío de rizos y plumas.
 
Parecía una maldita diosa. No había otra manera de decirlo.
 
Una sonrisa maliciosa apareció en el rostro de Paula mientras caminaba hacia mí, podía escuchar el “clic” de sus tacones en el suelo de mármol.
 
Yo la estaba mirando, y esa era exactamente la reacción que Paula quería. Nico susurró algo así como “no cedas la hora” pero mi cerebro sólo estaba procesando el escote y las piernas apenas existentes.
 
—¿Estás disfrutando de la fiesta? —susurró Paula mientras se inclinaba al lado de mi oreja.
 
Tomé una respiración profunda, el corazón comenzaba a latir en mi garganta. Los dedos de Paula se cerraron alrededor de los míos. Todo acerca de ese momento, toda de la noche, se sentía mal.
 
Pero todo en mi vida en ese momento se sentía mal también.
 
Paula tomó el plato que todavía tenía en la mano y lo metió en la dirección del agua sin siquiera mirar hacia él.
 
—¿Bailamos? —dijo. Ni siquiera me había cuenta de que había llegado hasta que ató una máscara, tipo Zorro, negra por encima de mi cara.
 
Ella no me dio la oportunidad de responder, simplemente me sacó junto a las persona que se movían con la música palpitante.
 
Traté de no pensar en Lali, Paula guió mis manos a sus caderas. Ella envolvió sus brazos detrás de mi cuello. Paula conocía todos los movimientos correctos para excitar a cualquier hombre, las expresiones exactas para poner en su cara para que cualquiera se volviera loco. Todo sobre el momento era embriagadora, la oscuridad de la habitación, el olor embriagador que me recordó a una tienda de Abercrombie y Fitch, las máscaras y el brillo.
 
¿Por qué es tan difícil dejar de hacer algo malo, cuando se sabe que es tan malo?
 
—¿No me vas a desear un feliz cumpleaños? —dijo Paula con esa sonrisa maliciosa. Ella se acercó más a mí. No estaba seguro de que era posible moverse más cerca.

¿Cómo esperas que haga eso?, pensé mirándola.
 
—Los regalos son siempre aceptables a cambio de palabras —ella prácticamente ronroneó mientras movía sus labios más cerca. No fue hasta entonces que podía oler el alcohol en su aliento.
 
Me di cuenta de que Paula iba besarme, al mismo tiempo oí la voz detrás de mí.
 
—¿Peter?
 
Mi cabeza se giró para ver a Mariana cerca de la puerta. El horror y la traición llenaban su cara, sus ojos enrojeciendo.
 
Se sentía como si todos mis órganos internos desaparecieran.
 
Di un paso lejos Paula, pero no más cerca de Lali. Fue un paso en falso. Ella negó con la cabeza. Vi una escapar una sola lágrima sobre su mejilla. Se dio la vuelta y salió corriendo de la casa.
 
Todo en mí sabía que debía correr tras ella. Ahora era yo el que tenía que disculparse. Acababa de traicionar a Mariana y ella me había encontrado con la persona a la cual Lali odiaba más en todo Orcas.
 
Pero me quedé allí.
 
—Olvídate de ella —dijo Paula, colocando una mano en mi mejilla, tratando de sacar mis ojos de la puerta y de nuevo a ella —Vamos, es una fiesta. Se supone que deberías estar divirtiéndote.
 
Miré de nuevo a Paula y me sentí enfermo.
 
¿Qué estaba haciendo?
 
¿Por qué había incluso aceptado bailar con ella?
 
Sacudiendo la cabeza, me di la vuelta para irme. Paula agarró mi brazo en un férreo control que me sorprendió por su fuerza. Tenía la cara lívida, los ojos muy abiertos y salvajes detrás de la máscara.
 
—No vayas tras ella, Peter —dijo con la mandíbula apretada—. Estás en mi fiesta. Este es mi cumpleaños.
 
—Y esa era su novia —la voz de Gaston llegó detrás de mí. Me volví para verlo a él y a Nico de pie detrás de mí, con los brazos cruzados sobre el pecho.
 
Paula apretó la mandíbula de nuevo, sus ojos pasando de mí a Nico y Gaston.

—Creo que todos ustedes deben irse ahora.
 
—Con mucho gusto—dijo Nico, ya en dirección a la puerta.
 
Mis ojos eran fríos, mientras miraba pasar a Paula y se dirigió hacia la puerta.
 
—Tu novia se va a arrepentir por aparecer aquí sin invitación —dijo Paula con voz fría como el hielo.
 
Todo estalló en mi interior al oír sus palabras. Me volví una vez para mirarla, con los ojos oscuros. Cerré mis dedos en puños. Alguien tiró de la parte posterior de mi chaqueta y me tiró a través de la multitud hacia la puerta.
 
Sentí que por fin pude respirar de nuevo tan pronto como salimos. Y entonces me acordé de cómo Lali se había quedado al vernos. Pero no había ningún rastro de ella.
 
—¿En serio, Peter? —se enfureció Nico y empezó a empujarme hacia el coche—. ¡Eres un maldito idiota! ¿En qué estabas pensando?
 
Quería gritar. No necesitaba a Nico diciéndome que yo era un idiota, yo ya sabía eso. Metí la pata de una manera importante.
 
—Mariana va a enfurecerse, lo sabes ¿verdad?—dijo Gaston mientras miraba hacia mí.
 
¡Cállate!
 
Agarré una de las grandes rocas que bordeaban el camino de Reca y lo tire hacia el medio del césped, dejando escapar un silencioso grito en el cielo negro.
 
Odio esto.
 
Odio esto.
 
Me odio.
 
Saqué las llaves de mi bolsillo, se las lancé a Nico y me subí al asiento trasero.
 
Ninguno de los dos dijo una palabra para mí mientras nos dirigíamos de regreso a mi casa.
 
Había arruinado completamente mi mundo entero.
 
Realmente lo arruine todo hoy.
 
No voy a culpar a Lali si rompe conmigo.

¿En qué estaba pensando?
 
Yo no lo estaba haciendo.
 
Yo simplemente no quería.
 
Pero ahora todo está arruinado.
 
Y no hay nadie más a quien culpar más que a mí.

9 comentarios :

  1. En TODAS las novelas que existen en el mundo, Peter es el idiota y Lali la pobrecita cornuda?. Es pregunta.

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  2. Nunca, lo digo enserio NUNCA pense que se iba a equivocar tanto!!
    Ahhhhh!!!!!!!! lo odio ¬¬
    No sé porque sigo pensando que alguien va a descubrir a Lali y se la van a llevar, o porque tengo el presentimiento que ella se va a ir!! esperemos que me equivoque!! :(
    quiero otro cap, besos
    esencialaliter.blogspot.com - @rochi16ta

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  3. Ay no porque porque
    Si estaban tan bien antes espero que se arreglen pronto
    Subí más noveeee me encanta

    ATTE: Valeria : )

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  4. Pense que iba ase peor!! Más me encanta!

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  5. Efectivamente Peter esta haciendo todo mal.

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  6. esto se venia venir ........... lo mas seguro es q paula va a descubrir el secreto de lali y algo fo va a pasar con todo eso ....... a la final los dos se terminaron lastimando ........ lali va a estar dolida xq aunq no lo decia ella le dio una oportunidad a l amor y ahora todo lo q ella pensaba sobre eso se confirmo osea creo q es lo q va a pensar y todo es mas dificil con peter q no habla y no le puede explicar osea aaaaaaaaaa ya me confundi
    espero el siguiente
    mica

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  7. pensé que lo de peter iba a ser peor pero en realidad sí no llegaba antes lali vaya uno a saber que hubiera hecho con Paula capaz besarla y más ahora la va a tener que remar bastante sí quiere reconciliarse con ella. La amenaza de Paula da miedo :$ besos Naara

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  8. nos dejaste en la mejor parte! Más más más

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